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Hace unas semanas nos encontrábamos con una entrevista a Roberto Carlos, en el que hablaba del trato del vestuario con los diferentes entrenadores que tuvieron en la época llamada de «Los galácticos». Si no has visto la entrevista te aconsejo que la veas aquí antes de continuar leyendo. A mi me hizo reflexionar y recordar algunos puntos que creo que a los entrenadores pueden servirnos de ayuda a la hora de gestionar un vestuario y sus normas internas.

Sinceramente, me llama mucho la atención que la mayoría de entrenadores, entre los que me incluyo, inicialmente nos preocupemos en exceso por confeccionar la plantilla pensando en lo que veremos en el terreno de juego, nos preocupemos en elegir los jugadores correctos para desarrollar el juego que queremos, dediquemos muchas horas a descubrir los aspectos del juego que mejor me van a hacer funcionar en los partidos, pero que no dediquemos el tiempo necesario a conocer el código del vestuario, algo que me puede echar más rápido del equipo que los propios resultados. Antes de seguir te invito a que te suscribas a nuestro blog, nos gusta tener pequeños detalles con nuestros suscriptores cada semana y siempre les avisamos a ellos primero de nuestras publicaciones en el blog y de las novedades de la aplicación para buscar partidos de Mis Amistosos. Puedes hacerlo aquí debajo.

Continuemos…

En este artículo analizaremos qué es el código del vestuario y cómo conocerlo para poder enfrentarte a él.

¿Qué vamos a ver en el artículo?

¿Qué es el código del vestuario?

El código del vestuario es el conjunto de normas no escritas que tienen los jugadores, costumbres, hábitos, formas de hacer las cosas y creencias, que cambiarlas, pueden suponer un cambio tan importante para ellos que les cambien los aspectos emocionales y por tanto interfieran en su actitud y rendimiento.

¿qué es ser entrenador?

Para ser capaces de entender las razones que nos obligan a conocer el código del vestuario es importante responder a la pregunta ¿qué es ser entrenador?

Ser entrenador es lograr que tus jugadores sean mejores de manera individual y colectiva una vez que tu hayas influido sobre ellos, es decir, ser capaz, de como hablábamos en este artículo, de liderar a tus jugadores para conseguir lo que se propongan.



En esta definición que hemos dado, no habla que debe ser de la manera que nosotros digamos, que debemos pasar por encima de las ideas de los demás e imponer las nuestras, que no tenemos que gestionar las relaciones en este proceso de creación de la identidad del equipo. No, habla de liderar y liderar es lograr que los demás te sigan y no es un proceso de un día.

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Ronaldinho, Beckham, Kaka y Carlo Ancelotti en rueda de prensa con AC Milan

¿En todos los vestuarios hay códigos?

La respuesta sin ninguna duda es si. Y… ¿si es un grupo totalmente nuevo y los jugadores se acaban de conocer? Si es nuevo, el código se está haciendo desde ese primer instante en el que toman contacto.

Entonces… ¿No puedo cambiar el código del vestuario?

Si, si puedes y además debes cambiarlo, pero no con el objetivo de imponer tus normas, sino con el objetivo de mejorarlo, de crear un código más sano que beneficie a más jugadores, que ayude a unir más el equipo y esto se logra a medio y largo plazo.

¿Qué es lo primero que debo hacer cuando llego a un equipo?

Normalmente nos centramos en conocer a los jugadores, conocer su desempeño en el campo, sus virtudes y defectos y evaluamos de qué manera queremos jugar. Ya estuvimos hablando de este punto en los artículos relacionados con la pretemporada y con la selección de jugadores. Pero también es importante prestar atención a las conductas internas del grupo, a como se relacionan entre ellos, analizar líderes, ver quien tiene más peso en el vestuario, acciones que se repiten, costumbres y hablar con ellos para abordar los temas que más les preocupan, ponerlos en común y definir actuaciones.



Aspectos y errores que forman parte del código de vestuario

A continuación vamos a enumerar aquellos aspectos que forman parte de los códigos de vestuario y que debes observar, analizar y determinar tu estrategia de intervención o no intervención. Es importante que tengas en cuenta que esto no es una guerra que hay que ganar, tu lo que quieres es evitar la guerra, liderar a un grupo que tiene unas necesidades, costumbres y maneras de hacer que debes decidir si son buenas o tóxicas para el funcionamiento y rendimiento general del grupo y si optas por intervenir determinar una estrategia que beneficie.

  • Horarios de entrenamiento. Si tienes la posibilidad de adaptar los horarios a las preferencias de los jugadores es algo que debes tener en cuenta. En ocasiones hay partidos interesantes que los jugadores quieren ver y son a la misma hora del entreno, gestionar este punto y no dejarlo pasar es muy importante.
  • Espacios en el propio vestuario. Jugadores que tienen su sitio «asignado» en el vestuario, es un punto que jamás he entrado, ya que siempre se han respetado entre ellos, pero si tienes que entrar mi posición siempre será con el jugador más veterano y el que esté más respaldado y valorado del equipo.
  • Música del vestuario. La música dentro de un vestuario me parece fundamental y por un lado pienso que no debemos entrar a valorar la temática, pero si veo que antes de un partido ponen música relajante, creo que debemos entrar a recomendar que es lo que activa y que no activa.
  • Rutina en la salida al campo. Muchos jugadores tienen ciertas manías para saltar al campo y muchos entrenadores también. Entrar en el punto de decir que deben salir por orden de numeración cuando tienen en la cabeza que si no salen los últimos al campo van a hacer un mal partido, creo que es complicarnos el trabajo.
  • Calentamiento. Hay jugadores que ciertos ejercicios de calentamiento no les gusta y les ves disimulando para no hacerlos. Ahí decides, si aceptas o impones ese ejercicio.
  • Jugadores importantes. Los jugadores importantes siempre tienen más que decir en el campo y fuera de él. Pretender tratar a todos por igual cuando hay rendimientos diferentes no tiene ningún sentido.
  • Ciclo de capitanes. Intervenir en el ciclo natural de capitanes solo porque el capitán que hay en ese momento no es de tu agrado es un error. En este artículo hablamos de algunas estrategias para elegir tus capitanes correctamente y algunas opciones para que ese capitán que a ti no te convencer sea sutilmente sustituido.
  • Los mayores primero. Es un error no considerar que los jugadores veteranos tienen su peso en el equipo, pueden no dar su mejor rendimiento dentro del campo, pero fuera siempre serán muy importantes. Aprender a manejar esas situaciones es fundamental.
  • Posiciones y roles en el campo. Atender a las posiciones predilectas por cada jugador puede parecer cesión de autoridad, pero generarás compromiso y sentimiento de pertenencia y desde ahí podrás manejar las necesidades del equipo. Estarán más receptivos a aportar desde otra parte del campo si previamente se ha atendido sus necesidades.
  • Rutinas previas a partidos. Hay jugadores que tienen hábitos extremadamente extraños. Yo me he encontrado desde un alevin que su padre le daba bebida Monster antes de los partidos y salía acelerado y más de una vez expulsado por agresividad a jugadores juveniles que no quieren tocar balón en el calentamiento o a jugadores que si no daban al primer contacto con el balón un golpeo en largo tenían ya algo dentro que les influía el resto del partido. Mi consejo es que valores que es lo peligroso para el jugador, que va a influir en su rendimiento y en el del equipo y determines si intervenir o no.
Sir Alex Ferguson
Sir Alex Ferguson

Herramientas para conocer el código del vestuario e influir positivamente.

Para conocer el código del vestuario lo primero que necesitas es tener interés en conocerlo y en conocer a tus jugadores. Para ello te doy algunas pautas:

  • Presencia. Ten siempre presente que está ahí, que cada actitud y cada reacción forma parte de ese código y que intervenir en ese instante debe hacerse sabiendo muy bien lo que se está haciendo.
  • Observación. Conoce a tus jugadores, una de las cosas que no podemos dejar de hacer los seres humanos es comunicarnos. Nos comunicamos continuamente, aunque intentemos no hacerlo también estamos diciendo algo. Observa a tus jugadores y conócelos para lograr ayudar a que su código de vestuario sea cercano a tus normas.
  • Interacción. Interactúa con tus jugadores. Ellos son personas haciendo unas tareas en las que su estado emocional influye y mucho en la ejecución. Conviene que estén felices, que se sientan parte activa y se tengan sentimiento de pertenencia con lo que hacen. Para ello es imprescindible ser cercano con ellos.
  • Naturalidad. Ejercer el papel de entrenador y sobreactuar en tu rol te distanciará del grupo y únicamente te alejará de ser parte del vestuario.
  • Negociación. En un equipo se dan muchas situaciones en las que hay ideas contrapuestas, como líder debes ser capaz de que tu equipo acepte las normas que tu quieres fijar, pero no por imposición, sino por convencimiento.

Conclusion

Si has leído todo el artículo habrás extraído alguna información valiosa que puede ayudarte a mejorar la gestión del grupo. Te habrás dado cuenta ya, que para intervenir en los hábitos y normas internas que formar parte de este código del vestuario la mejor manera es que tu también sientas y hagas sentir a tu equipo que tu también formas parte de ese vestuario. Tu misión es liderar a tu grupo, liderarlo desde dentro, no como un elemento externo que impone normas. Liderar desde dentro facilita la modificación de esas conductas tóxicas que forman parte del código de vestuario y que determinas que deben ser eliminadas. Centra todo tu esfuerzo en conocer a tus jugadores, hacerles sentir respaldados y que tu presencia es la de un líder interno que forma parte del vestuario.

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